Cada día, antes de elegir qué outfit voy a usar, me pregunto: ¿cómo quiero sentirme? Pienso en palabras como "cómoda, fresca, flexible, con libertad de movimiento". Mientras tanto, empiezo a buscar las prendas para vestirme, porque la presión del tiempo apremia. Pienso en jeans, camiseta y tenis, una opción fácil, ya que voy a estar en casa todo el día trabajando. Sin embargo, cuando me visualizo con jeans sentada frente al escritorio, siento cierta incomodidad: las piernas aprisionadas, tensión y movimiento limitado. ¡Qué drama el mío por usar jeans!
Continúo buscando. La segunda opción que viene a mi mente es un vestido suelto y fresco, pero el brasier que tengo no funciona con ese vestido. Entonces, pienso en unos leggings. ¡Sí, qué buena idea! Combinarlos con una falda cruzada de lycra suena perfecto. Estaré muy cómoda, y además, tengo un cumpleaños por la noche. Así que, elijo una blusa básica de terciopelo de la marca Carolina Díaz. Quedará un outfit formal, combinado con botines texanos de lagarto. Quizás un poco recargado, pero me encanta.
Ahora faltan los accesorios. Tengo un collar de flores grandes que me cautiva. Es muy llamativo, ideal para una fiesta, pero decido ponérmelo. Si sigo esperando la ocasión perfecta, quizás quede guardado por mucho tiempo. Lo combino con unos aretes pequeños y sobrios para equilibrar el look. El resultado final es un outfit casual-formal, seguramente muy elegante para estar en casa trabajando y también adecuado para el cumpleaños de la noche.
No importa si estoy demasiado elegante y glamorosa, lo que realmente cuenta es que me siento cómoda y linda para trabajar desde casa. Con este look, mi energía se mantiene alta, lista para un día único, como todos los días de la vida.
NO IMPORTA si estás acompañada o sola, si es una cena familiar cotidiana, la reunión semanal del trabajo, una cita en el colegio, la compra diaria en la tienda o la visita al médico. Lo que realmente importa no es la ocasión, sino cómo te sientes y cómo te ves a ti misma. La vida se vive en cada instante, y aprovecharla al máximo es nuestra decisión. Tener la actitud y disposición para disfrutarla también es una elección. Estar siempre linda y con buena vibra para vivir cada instante es otra decisión que podemos tomar.
Te invito, HERMOSA MUJER, a vivir intensamente, llena de amor cada día. Te invito a usar la ropa que te hace sentir linda. Es un gran privilegio estar viva y gozar de salud. Libérate de las cadenas del drama, sal de la caja del victimismo y la preocupación. Abre los ojos al cielo, deja que la luz del sol te ilumine y te permita ver más allá del torbellino que ha creado la mente, ese que está lleno de sufrimiento, dolor, fracaso, preocupación o enfermedad.
Es momento de sonreír y decidir vivir cada momento desde el amor, confiando en la divinidad, segura de que el Todopoderoso siempre está a tu lado, acompañándote en cada situación. La confianza de que nunca estás sola te da la fuerza para perseguir ese deseo que tienes en tu corazón, sin miedo. La valentía te convierte en una mujer fuerte, feliz, segura y brillante.
Lo que IMPORTA es que decidas vestir tu vida con lo que te gusta. Los tonos, colores y siluetas que prefieres son parte de tu esencia. Hoy, decide usar tu ropa favorita, esas prendas que compraste y que tienes guardadas, los colores olvidados, las prendas para ocasiones especiales. El momento es ahora. Usa los zapatos que te encantan, aunque sean un poco incómodos; adaptarse a la incomodidad a veces nos lleva a nuevos retos. Desempolva esa cartera hermosa y disfrútala. Ponte ese collar que te fascina, ese que miras todos los días esperando el momento adecuado para usarlo. Recuerda que el momento perfecto es ahora. Brilla con toda tu luz, siempre es el momento para brillar con tu luz propia. Cada mujer es una estrella brillante en el universo. Permite que esa luz se expanda y contagie al mundo con tu magia. Estás lista, esa luz siempre ha estado en tu corazón. Decide sacarla y usarla.
¡Feliz Instante, Hermosa Mujer!